Arca Santa de la Catedral de Oviedo

Detalle de los relieves del arca Pulse para ampliar

Periodo de ejecución: Marzo – Julio 2017

Inversión: 56.000 €Salto de línea Salto de línea Ficha técnica PDF

El Arca Santa es una obra excepcional de orfebrería del siglo XI, un relicario monumental sufragado por Alfonso VI de León y Castilla y su hermana Urraca. Según la tradición, procedía de Jerusalén y albergaba reliquias de Jesús y María, además del sudario del rostro de Jesús. El arca acabó por convertirse en un objeto de devoción en sí mismo, hasta el punto que su culto fue utilizado por la propia monarquía como fuente de legitimación desde sus primeros donantes hasta Felipe V.

Las placas de plata que recubren un alma de madera están decoradas mediante las técnicas de nielado, repujado, cincelado y dorado, con una iconografía cristológica en línea con el contenido a guardar. Presenta, asimismo, numerosas inscripciones en latín y árabe. Las primeras constituyen fundamentalmente una sección del acta de apertura del arca en 1075, mientras que las segundas insisten en conceptos como la gloria, la soberanía y la bendición y asistencia de Dios, y complementan, según su ubicación, la iconografía.

Proceso de restauración Pulse para ampliar

Gran parte de las alteraciones que sufría esta pieza se debían a que hasta el siglo XVI estuvo accesible al contacto de los fieles, que la tocaban provocando pérdidas del recubrimiento de plata. En 1934, la Cámara Santa sufrió una voladura y la pieza resultó desmembrada, perdió el fondo del cajón derivando en el descuadre de la estructura del alma de madera que presentaba suciedad, grietas y pérdidas de material, con evidencias de haber sufrido un ataque de xilófagos. El revestimiento metálico mostraba deformaciones, roturas y pérdidas de plata y nielado en muchas de las placas, además de un avanzado estado de sulfuración, que había desvirtuado el juego cromático original de la pieza.

En los estudios e intervención de la pieza ha participado un equipo interdisciplinar compuesto por un conservador-restaurador con amplia experiencia en intervenciones de orfebrería, dos plateros, un arqueólogo, una licenciada en historia del arte con especializada en técnicas de platería antiguas, una gemóloga, los técnico del laboratorio de estudios físicos, químicos y biológicos del IPCE, un doctor ingeniero de montes, un fotógrafo profesional y una empresa de digitalización de imágenes en 3D. Se han realizado numerosos análisis de la pieza, destacando la microscopía electrónica de barrido, espectroscopía infrarroja, cromatografía de gases o radiografías, que aportaron información sobre las técnicas constructivas (por ejemplo los tipos de nielados y las huellas de las herramientas empleadas en los repujados), y sobre su estado de conservación (superposición de placas de plata o identificación de los añadidos históricos).

Alteraciones de la cara frontal Pulse para ampliar

Los trabajos se han centrado en paliar las patologías que presentaba y garantizar su estabilidad estructural. Para ello, fue necesario desmontar el recubrimiento de plata, lo que ha permitido el refuerzo de las placas y del cajón de madera y la limpieza y consolidación de su estructura.

Este desmontaje facilitó la limpieza, la eliminación de ciertas deformaciones y la recuperación de zonas originales que habían quedado ocultas en anteriores reparaciones. Todo ello mejoró, en definitiva, la lectura del conjunto y corrigió los desajustes que presentaban las piezas. Bajo la tapa, que se desmontó en último lugar, se encontraron monedas de los siglos XII al XV y una pequeña cruz de peregrino.

La plata se ha limpiado combinando el empleo de disolventes con procedimientos mecánicos. Particularmente difícil ha resultado el tratamiento de la placa del Pantocrátor de la cara frontal, que se encontraba dañada como consecuencia de una intervención anterior. Se ha recuperado toda la superficie original que, en parte, permanecía oculta. Con el fin de evitar la sulfuración se ha aplicado una capa de protección a todos los elementos. El montaje final ha permitido incorporar los fragmentos de plata del arca depositados en el Museo Arqueológico de Asturias desde 1935.

Puedes ampliar esta información en la publicación digital dedicada a esta restauración Nueva ventana

Subir