La fotogrametría arquitectónica es una técnica usada para documentar con la mayor precisión bienes del Patrimonio Cultural Arquitectónico o Arqueológico. Se parte de la restitución de pares de fotografías que forman modelos estereoscópicos que se controlan mediante medidas topográficas muy exactas para obtener un documento gráfico en 3D del objeto muy útil para la restauración.
Algunos de los numerosos trabajos fotogramétricos realizados por el IPCE desde la aplicación de esta técnica a la documentación del Patrimonio Cultural son: Alhambra de Granada, Mezquita de Córdoba, La Giralda y Catedral de Sevilla, Monasterio de El Escorial, Plaza Mayor de Madrid, torres mudéjares de Teruel, claustro de Silos en Burgos, catedrales de Burgos, Toledo, Astorga, Santiago de Compostela, Palma de Mallorca, etc.
Como parte de la documentación previa a la intervención sobre la fachada principal de la Biblioteca Nacional, se solicitó al Gabinete de Fotogrametría un plano a escala 1/50. Con el fin de conseguir una documentación precisa del conjunto, se realizaron los modelos estereoscópicos de la portada, de cada una de las esculturas existentes en la escalinata de entrada y de las farolas.
Por otra parte, se procedió a la definición del alzado y secciones de la escalera mediante topografía y delineación. La unión de estas técnicas permite obtener un modelo 3D del conjunto así como el alzado y las secciones 2D que aseguran la definición geométrica de la portada.
Tras la caída de una de las conchas acopladas a los muros, se planteó la necesidad de restaurar las dos fachadas del edificio. Como apoyo a esta intervención, se desarrolla una labor de fotogrametría estereoscópica de la que resultan los alzados a escala 1/50 con desarrollo de los quiebros del que da a la Calle de la Rúa, para poder representar su verdadera magnitud.
En los alzados se representa de forma fidedigna y con gran detalle cada uno de los elementos de la fachada en su estado actual, incluso marcas de cantero, grietas o pérdidas de material. Sobre los mismos, los restauradores y técnicos de laboratorio vuelcan los datos que permiten definir con toda precisión los daños apreciables en la fachada así como los tratamientos a aplicar. Se ha generado un modelo alámbrico tridimensional de las fachadas que permite entender la geometría del conjunto.
Se ha realizado un modelo virtual en tres dimensiones de la pieza en su estado previo a la intervención de restauración. En él puede observarse la estructura de base, despojada de los elementos de remate y de las figuras que originalmente se distribuían bajo los arcos que dividen la superficie y que se han repuesto en su posición al término de la restauración.
Sobre el dibujo de la arqueta realizado en 3D, se acoplan una serie de fotografías ortogonales que permiten obtener un modelo del arca con su textura y volumen reales, lo que aporta una valiosa información a los restauradores.
A causa del derrumbe producido al sur de la puerta de San Juan, se requiere la documentación topográfica con curvas de nivel cada 25 cm de la zona afectada, así como el perfil de coronación de los paños de muralla.
Mediante la combinación de la topografía clásica con la rectificación fotográfica de los paños se aporta no sólo la información del perfil, sino que además queda reflejado el tipo de material del que están hechos y el grado de deterioro de los mismos. El modelo generado con esta combinación de técnicas proporciona una visión tridimensional del conjunto que muestra lo escarpado del terreno y, por consiguiente, las dificultades de instalación de los andamios para ejecutar los trabajos de restauración.
Se ha realizado un vídeo con un recorrido virtual que potencia la compresión de la documentación aportada así como una visión mucho más real y completa de los restos de la muralla.